La hermana Inah Canabarro, monja brasileña y la persona más anciana del mundo, murió a los 116 años. Dedicó su vida a la educación y la fe católica.
La hermana Inah Canabarro, monja brasileña y persona más anciana del mundo, falleció este miércoles a los 116 años en su hogar en Porto Alegre, Brasil. Su congregación, la Compañía de Santa Teresa de Jesús, confirmó que murió por causas naturales a pocas semanas de cumplir 117.
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Inah nació en 1908.
En enero de 2025, LongeviQuest la reconoció oficialmente como la persona más longeva del planeta. Su fe católica, dijo en un video de febrero, fue la clave de su larga vida. Con buen humor, compartía pinturas de flores, recitaba oraciones y decía sentirse joven y bonita.
Desde adolescente se consagró a la vida religiosa. Vivió en Montevideo, luego en Río de Janeiro, y finalmente regresó a su natal Rio Grande do Sul. Enseñó durante décadas y fue formadora de bandas escolares. Entre sus alumnos estuvo el general João Figueiredo, último dictador militar de Brasil.
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Además de su labor educativa, su familia tiene raíces históricas
Su bisabuelo fue un general destacado en los conflictos del siglo XIX tras la independencia brasileña. En 2018, el papa Francisco la homenajeó por su 110º cumpleaños.
LongeviQuest recordó su legado con estas palabras: “Su vida larga y significativa tocó a muchos. Su legado como educadora devota, hermana religiosa y supercentenaria será recordado con gran admiración”.
Con su partida, el título de persona más longeva pasa a Ethel Caterham, británica de 115 años. Canabarro se posicionó como la segunda monja más anciana registrada y la vigésima persona más longeva documentada.
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