Desde que comenzó el régimen de excepción impuesto por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, el mayor enfoque se le ha dado a las autoridades ha sido el de detener a toda persona que pertenezca a cualquier grupo al margen de la ley.
En El Salvador, las reconocidas Mara Salvatrucha eran unos de los objetivos principales. El Gobierno declaró que la última captura relevante para el país fue del 12vo cabecilla de la organización terrorista, contando entonces entre la lista a:
- Carlos Antonio Pérez Nieto o Lola City Paraíso,
- Manuel Alfredo Herrera Durán o Kalifa,
- Eduardo Pérez, alias Scooby,
- Byron Arísitides Salazar Ramírez o Sleepy,
- Álex Alfredo Ábrego conocido como Goofy,
- Misael Alberto Romero Mejía, alias Danger,
- José Manuel Bonilla o Mercenario de Stoner,
- Entre muchos otros cuyos nombres no fueron difundidos.
Declaraciones oficiales
El ministro de seguridad, Gustavo Villatoro, hizo diferentes aclaraciones respecto a los detenimientos que se han presentado durante su ejercicio, mencionando más recientemente que la captura de alias Lola City se dio “en México, desde ordenaba crímenes”.
De igual manera, ha dado a entender que sus acciones han logrado golpear financiera y fundamentalmente el flujo de droga que asediaba la región, y que la idea es llegar a desarticular “completamente estas estructuras“.
“Las acciones de las autoridades de Seguridad no solo han resultado en la captura de líderes de pandillas, sino que también han impactado significativamente las finanzas y el flujo de droga de estas organizaciones terroristas. Con reformas legales recientes, se espera que los líderes capturados enfrenten condenas de hasta 60 años de prisión, demostrando el compromiso del Gobierno en la lucha contra el crimen organizado.”
Funcionalidad legislativa
Los logros se le atribuyen al Plan de Control Territorial implementado junto al régimen de excepción que le ha dado demasiado control a aquellos con el poder de capturar o detener a las personas.
Villatoro afirma que “el trabajo conjunto de la Policía, la Fiscalía y la Fuerza Armada ha sido clave en la captura de líderes y colaboradores de pandillas, proporcionando información valiosa para analizar y contrarrestar las estrategias de impacto de estas estructuras terroristas.”
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