A pocos días del 10 de enero, fecha de los actos de posesión en Venezuela, crecen las amenazas de captura sobre Edmundo González, líder opositor, que asegura ser el presidente electo del país
Una presencia incómoda en Venezuela
Para el régimen de Nicolás Maduro la presencia de Edmundo González en Venezuela es, como menos, un insulto. Un insulto que se categorizó, prácticamente como delito, cuando hace algunos días el propio presidente venezolano ofreció recompensa por la captura de González. Pese a ello, González, impulsado por el apoyo de varios mandatarios alrededor del mundo que lo han reconocido como presidente electo y, muy especialmente, por la reciente reunión con Joe Biden, ha insistido en que estará presente en Venezuela para jurar como primer mandatario electo.
El régimen insiste en la captura de Edmundo González
González está advertido, retumba en los pasillos de cualquier entidad del gobierno venezolano. Una advertencia que, para el líder opositor, pese a los supuestos delitos que le endilgan
- Desconocimiento a las instituciones del estado
- Conspiración
- O Usurpación de funciones
Carece de fuerza. Y, justamente eso, la actitud despreocupada de González es lo que ha hecho que se aumente el tono respecto a las amenazas: Diosdado Cabello, uno de los más importantes alfiles del chavismo, insiste en que tan pronto González ponga un pie en el país será capturado. Y bueno, no solo eso, la apuesta de su captura se amplió incluso hasta sobre los acompañantes del rival de Maduro, ya que en los últimos días trascendió que varios expresidentes viajarían con la figura de oposición. El ambiente en Venezuela se sigue complicando de cara a los actos de posesión.
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