Jóvenes consumen el óxido nitroso inflando globos

Cómo el gas de la risa se convirtió en una adicción mortal, pero legal en EEUU.

El óxido nitroso, usado en cocina y odontología, se ha convertido en una droga mortal. Su uso recreativo crece en EE.UU., impulsado por el vapeo y redes sociales.

Conocido por sus usos médicos y culinarios, el óxido nitroso ha encontrado un nuevo y peligroso lugar en la cultura juvenil: la adicción recreativa. Su accesibilidad y efectos eufóricos lo han convertido en una sustancia popular, sobre todo en tiempos de pandemia.

Otras noticias: Uno de cada tres niños y adolescentes no duerme las horas necesarias

El caso de Meg Caldwell

Meg Caldwell, joven promesa de la equitación, comenzó a inhalar óxido nitroso en la universidad. Durante la pandemia, su consumo aumentó drásticamente. A pesar de sufrir parálisis temporal y pérdida de control urinario, siguió comprando el gas en tiendas legales. Murió dentro de su automóvil, justo después de inhalarlo.

Entre 2019 y 2023, las muertes por intoxicación con óxido nitroso aumentaron más del 110%. Además, los reportes de uso intencional crecieron un 58%, según datos de centros de toxicología estadounidenses.

Marketing disfrazado

Empresas como Galaxy Gas ofrecen el producto con fines culinarios, pero empaques llamativos y sabores dulces lo hacen atractivo para jóvenes. Envases grandes, colores brillantes y nombres como “Miami Magic” fomentan su mal uso.

Léase también: El baile y una dieta sana, en la receta para vivir 120 años del cardiólogo del rey emérito

Videos virales en TikTok y menciones en programas de entretenimiento popularizaron el consumo. Celebridades como Ye y la rapera SZA han hablado de sus efectos negativos.

Una regulación insuficiente

Aunque Reino Unido lo prohibió en 2023, en EE.UU. solo Luisiana ha vetado su uso. La FDA emitió una advertencia, pero aún se venden versiones grandes en tiendas y plataformas como Amazon.

Una tragedia legalmente permitida

Casos como el de Marissa Politte, quien murió tras ser atropellada por un conductor bajo los efectos del gas, han llevado a demandas millonarias. Aun así, muchos estados no han tomado acción.

El óxido nitroso sigue siendo legal y de fácil acceso, lo que ha permitido que jóvenes como Meg y Marissa pierdan la vida. Urge una regulación clara para frenar esta peligrosa tendencia.


Te puede interesar: 63 mujeres presas por aborto en 12 estados de México