Plomo en gasolina

El plomo en la gasolina está relacionado con más de 150 millones de casos de trastornos mentales, según un estudio

Un estudio asocia 151 millones de trastornos mentales en USA a la exposición al plomo en gasolina, destacando su impacto en generaciones nacidas entre 1940 y 2015.

Un reciente estudio publicado en Journal of Child Psychology and Psychiatry estima que la exposición al plomo en gasolina causó 151 millones de casos de trastornos mentales en Estados Unidos en los últimos 75 años. El análisis revela que el plomo, utilizado en combustibles hasta 1996, impactó significativamente en la salud mental de generaciones expuestas durante su infancia.

Investigadores de las universidades de Duke, Florida y Carolina del Sur señalaron que las generaciones nacidas entre 1966 y 1986 fueron las más afectadas. Los efectos incluyen mayores niveles de depresión, ansiedad, hiperactividad y dificultad para controlar impulsos. Los nacidos entre 1966 y 1970, coincidiendo con el pico de uso de gasolina con plomo, sufrieron las mayores consecuencias.

Aunque se prohibió su uso en combustibles en 1996

El plomo sigue presente en fuentes como pinturas antiguas, tuberías y juguetes importados. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) advierten que no existe un nivel seguro de exposición, ya que incluso cantidades mínimas pueden dañar el cerebro y el sistema nervioso, especialmente en niños pequeños.

Aaron Reuben, autor principal del estudio, destacó que estos hallazgos refuerzan la importancia de eliminar el plomo de los entornos humanos. Además, señaló que las reducciones logradas en niveles de plomo en sangre son significativas, pero aún hay margen para mejorar.

El estudio también recuerda el impacto ambiental y social de políticas atrasadas para regular sustancias dañinas

Subraya la necesidad de priorizar la prevención y la seguridad pública en futuras decisiones. La doctora Lisa Fortuna, de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría, elogió la investigación por arrojar luz sobre el vínculo entre toxinas ambientales y trastornos psiquiátricos, afirmando que es un llamado a aprender de los errores del pasado.


Te puede interesar: La FDA podría prohibir finalmente el colorante rojo artificial en bebidas, dulces y otros alimentos