A medida que se acercan los días para las elecciones en Venezuela, Nicolás Maduro fortalece su radical discurso. Esta vez, señaló que el país elegirá entre la paz o la guerra.
Paz o guerra
Pocos días separan a Venezuela de una nueva jornada de elecciones presidenciales, el próximo 28 de julio. Las elecciones de este año han despertado mucho interés en la comunidad internacional, toda vez que la oposición venezolana cuenta con bastantes opciones de arrebatarle, constitucional y democráticamente, el poder a Nicolás Maduro. Por lo anterior, la tensión se ha hecho evidente en el actual gobierno y en el ala más radical del chavismo en el país representada por el propio Maduro, quien indicó que los resultados de los comicios que están por celebrarse marcarán el futuro de un país en paz o en guerra.
¿Una amenaza de Maduro?
Las palabras de Maduro empiezan a encender las alertas de cara a lo que sería la aceptación pacífica de unos resultados negativos para el oficialismo, más allá de las declaraciones que el propio heredero de Hugo Chávez había hecho hace unas semanas, cuando aseguró que en Venezuela todo seguiría en calma tras el 28 de julio. Fue así como, en un evento de campaña en Aragua, Maduro le insistió a los asistentes lo que se jugaban en las elecciones:
- ¿Quieren guerra o paz? ¿Tranquilidad o Guarimba?
- Ser una patria o una colonia
- Elegir entre democracia o fascismo
Y cerró señalando que, justo un día después de las votaciones, firmaría un primer decreto para convocar un diálogo nacional. Este discurso lleno de inconsistencias preocupa a la oposición y los demás candidatos que han venido haciendo distintos llamados para que haya un seguimiento riguroso del proceso electoral en Venezuela para que cuando llegue el momento de la definición, la misma no implique ningún tipo de desorden sin importar si el país sigue con el régimen actual o se inclina por un nuevo gobierno.
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