@Arturo Vargas
Los fanáticos religiosos y conservadores antiaborto tienden a hacer uso de la biblia como argumento para atacar el aborto. Lo anterior, a pesar que en este texto no se haga ninguna alusión negativa a esta práctica.
La biblia y su uso conveniente
Quien haya leído la biblia alguna vez en su vida, entenderá que es un texto lleno de situaciones que a lo largo de sus capítulos se van ofreciendo al lector, en función de ser interpretadas de la forma más adecuada, siempre, enfocados en el bienestar y las enseñanzas de Dios. Esto, claro, se convierte en una dificultad cuando dichas interpretaciones están mediadas por intereses un poco más mundanos, intereses humanos que, más que el bienestar del otro, buscan satisfacer los deseos propios.
Lo previamente dicho pasa con recurrencia cuando hablamos del aborto. Resulta que, aunque los fundamentalistas religiosos antiaborto siempre estén apoyando sus argumentos en las enseñanzas de Dios, la biblia no hace ninguna referencia negativa sobre el aborto. Es más, la biblia solo hace unas pocas referencias indirectas sobre el aborto (aunque algunos religiosos señalan que en el Didaché si se hace directa alusión); referencias que de forma conveniente son usadas para satisfacer posturas políticas que apuntan a la restricción de los derechos reproductivos de la mujer.
¿Qué referencia hay en la biblia sobre el aborto?
Dentro de las referencias que se hacen sobre el aborto en el texto más importante para el cristianismo, se encuentran:
- Génesis 9:6
- Salmo 36:9
- Salmo 139:16
- Jeremías 1:5
- Lucas 1:41
Todos estos pasajes de la biblia establecen una relación sobre lo que podría ser un feto por nacer. Tal como se señala anteriormente, no se hace una reseña específica sobre el aborto, aunque la justificación de los religiosos antiabortistas es que allí se reconoce una vida por parte de Dios, lo que implicaría que se estaría violando el sexto mandamiento “No matarás”.
La defensa de la vida de la madre
Lo curiosamente irritante sobre la posición de los antiabortistas es que tienden a trivializar el aborto, sugiriendo que las mujeres casi que lo hacen por deporte. Ahora, en medio de ese ida y vuelta de interpretaciones de la biblia, lo que muchos parecen obviar es que el texto si hace referencia a la importancia de la vida de la mujer, incluso, más que la del hijo que pudiese estar por nacer, tal como pasa en éxodo 21:22:
“Si algunos riñen y hieren a una mujer encinta, y esta aborta, pero sin haber otros daños, el culpable será penado conforme a lo que le imponga el marido de la mujer y pagará lo que juzguen los jueces. Pero si hay otros daños, entonces se pagará vida por vida”
Este, claro, no es un aparte que parezca interesar a los antiaborto que defienden su posición con la biblia. Justamente, ignorar lo enunciado en éxodo es lo que deja en evidencia el conveniente uso de la biblia para ir en contra del aborto. Que importante sería que el pensamiento crítico se ubicara sobre el fanatismo y que se le diera un lugar protagónico a la vida y la salud reproductiva de la mujer, esa misma, en la que el aborto como herramienta juega un papel fundamental.
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