Neela Ebrahimi, activista afgana de 17 años, recibe el Premio de la Paz Infantil por su lucha por los derechos educativos de las niñas bajo las restricciones talibanas.
La Fundación KidsRights otorgó el Premio Internacional de la Paz Infantil a Neela Ebrahimi, una joven afgana de 17 años que lucha por el acceso a la educación de mujeres y niñas en Afganistán. Este galardón, seleccionado entre 165 nominados de 47 países, reconoce los esfuerzos de Neela por defender los derechos femeninos bajo las estrictas leyes de los talibanes.
Neela, refugiada en Canadá, inició su activismo a los 13 años
Desafiando la prohibición del Ministerio de Educación afgano contra las niñas mayores de 12 años que cantaban en público. Su protesta, una canción viral en redes sociales, obligó al gobierno anterior a revertir esta restricción. Desde entonces, ella ha liderado campañas como “Soy mi propia canción» y tambien, ha llevado su mensaje a foros internacionales como la Cumbre de Derechos Humanos en Ginebra y TED Vancouver.
Al recibir el premio, Neela declaró: “Este reconocimiento amplifica las voces de las niñas afganas. Debemos darles fuerza y esperanza en los momentos más oscuros.” La ceremonia incluyó una interpretación de Neela junto a niñas de diversos continentes, acompañadas por un coro de 500 personas en Ámsterdam.
Su exclusión del sistema educativo afecta al 80% de las niñas afganas.
Marc Dullaert, presidente de KidsRights, subrayó la importancia de su trabajo: “La situación de las mujeres y niñas en Afganistán es insoportable”. El Premio Internacional de la Paz Infantil, que ha sido recibido por figuras como Malala Yousafzai y Greta Thunberg, consolida a Neela como una voz inspiradora para los jóvenes del mundo.
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