Un modelo digital muestra los devastadores efectos físicos y mentales que sufrirá el cuerpo humano en 2050 si las personas siguen durmiendo menos de 7 horas.
Un modelo digital, creado por expertos en salud y diseño, revela cómo lucirían los humanos en 2050 si persiste la tendencia de dormir menos horas de las recomendadas. La figura, bautizada como “Hannah”, muestra los efectos físicos y mentales de la privación crónica del sueño.
Según estudios recientes, muchas personas duermen un promedio de 6 horas y 20 minutos por noche, menos de las 7 a 9 horas recomendadas. La médica Sophie Bostock, responsable del análisis, advirtió que el descanso insuficiente afecta funciones clave del cuerpo.
“Hannah” presenta síntomas impactantes: dolor crónico de espalda, atrofia muscular, piel envejecida, pérdida de cabello y aumento de peso.
Estos problemas surgen porque, durante el sueño, el cuerpo produce hormonas esenciales para la reparación de tejidos y el mantenimiento de la salud muscular. Sin el descanso adecuado, dichos procesos se ven gravemente afectados.
El modelo también evidencia signos preocupantes como hinchazón en las piernas, síntoma de problemas cardíacos, y pérdida de memoria.
La privación del sueño altera el equilibrio de hormonas que regulan el metabolismo, como la leptina y ghrelina, lo que aumenta el riesgo de obesidad y diabetes. Bostock señaló que el cerebro sufre especialmente: el sueño permite consolidar recuerdos y mantener una función cognitiva óptima. Dormir poco impide estos procesos, afectando la memoria a corto y largo plazo.
Para evitar estos efectos, los expertos recomiendan dormir entre 7 y 9 horas diarias, realizar ejercicio moderado, mantener rutinas regulares y limitar el uso de pantallas antes de dormir. “Hannah es un llamado de alerta para que la gente tome en serio su descanso y preserve su salud”, concluyó Lisa Richards, de Bensons for Beds.
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